Voy a ir saltando de historia en historia hasta que la inspiración vuelva a mi pequeña cabecita para poder ponerme seria en alguna de ellas. Por ahora, os pondre los "prólogos" de algunas de las que ya tengo empezadas, junto con una canción que os recomiendo escuchar mientras leeis.
No son unas introducciones largas que digamos, pero lo suficiente para poder ausentaros un minuto o dos de lo que sucede a vuestro alrededor, además de poder ver de lo que es capaz mi pequeña cabecita al observar esas nubes que siguen paseando por el cielo.
Espero que disfruteis.
Boneless - Steve aoki ft.Chris Lake y Tujamo
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Poco a poco iba cerrando el libro “Aquerón”, en el que había
estado metida en él durante varias horas como si estuviera sintiendo en sus
propias carnes lo que leía. Se levantó lentamente de la cama y se estiró lo
máximo que pudo y más, oyendo como crujían algunos de sus huesos.
Con el libro aun en sus manos, manteniendo el dedo índice
entre las páginas, se dirigió al baño y encendió la ducha. Mientras el agua
llenaba la bañera, volvió al cuarto y colocó un marca páginas en su libro
favorito, dejándolo en el escritorio para después abrir unos cajones y coger
una ropa interior de color blanco y una blusa fina de lino color carne
ligeramente larga.
Dejó la ropa en la pequeña banqueta de madera tapizada de
terciopelo rojo cereza que se hallaba en el baño y se fue quitando la ropa, sin
preocuparse de doblarla. Ya en las paredes de cristal de la ducha, deslizó la
puerta y rozó ligeramente el agua. Una sonrisa se dibujo en su pálido rostro.
Cerró el grifo de la bañera y seguidamente, se metió en ella, soltando un
suspiro de placer al entrar en contacto el agua helada con su sensible piel.
Adoraba el agua fría.
Súbitamente, notó una presencia que se movía por el jardín,
rápida. Dentro de la casa, en las escaleras, sigilosa, detrás de la puerta del
baño...
Un sordo toque en la puerta consiguió que ella abriera los
ojos. Susurró unas palabras, apenas perceptibles al oído humano, suaves. Acto
seguido, la dicha sombra se hallaba delante de ella, empapándose de la helada
agua.
-¿Qué quieres?- sonrió Kiria, dirigiendo la mirada hacia su
viejo amigo.
- Solo – pronunció lentamente, rozando sus fríos dedos por
el suave hombro de ella - pasaba por aquí...
En un rápido movimiento, Kiria apartó la mano de Loveg,
consiguiendo que su cuerpo de volviera más opaco. Seguidamente, comenzó a
enjabonarse sus delicadas piernas blanquecinas parecidas al mármol en todos los
sentidos.
-Si te quieres dar un baño, tendrás que esperar a que acabe.
-Puede que tú estés viva... Pero te recuerdo, que sigo
siendo tu creador.
Con una leve inclinación de cabeza, Loveg obligó a Kiria
dejar lo que estaba haciendo y mirarla a la cara, con una mirada tan aterradora
que hubiera conseguido volver loco a cualquiera.
-Y yo te recuerdo – dijo con una leve risa, enseñando sus
brillantes y enormes colmillos – que fui yo quien te invocó en este mundo.
Kiria sopló en dirección de Loveg, haciendo que la imagen de
su superior se volviera más cristalina todavía.
- Malditos vampiros... – susurró él entrecerrando los ojos
antes de alejarse de ella.
- Estúpidos brujos... – escupió en el agua, terminando de
aclararse el cuerpo.
<3
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